Estoy segura de que si tuviese un pelo de bobo, J.Balvin jamás se hubiese hecho pasar por Carlos David. Pero como José Osorio, su nombre de pila, es uno de los artistas más talentosos y astutos de la música urbana.
Con una estrategia que rivaliza a la de Pitbull, J.Balvin se ha hecho famoso a nivel mundial en tiempo récord, aunque no sin un alto costo personal. Hace un par de años debió ser hospitalizado por agotamiento y hasta despidió a su papá como manager, por lo mucho que necesitaba tenerlo como padre solo de su lado.
Me lo encontré en la semifinal de Nuestra Belleza Latina y me contó que aunque sigue trabajando sin parar (su ritmo es frenético como se puede constatar en Snapchat) tiene sus trucos para evitar volver a enfermarse y la historia detrás del personaje de Carlos David. Fue amable, divertido y generoso con su tiempo y con su voz.
Aquí está la entrevista.
